El cine documental permite que el espectador conozca otros lugares, culturas y personas, sostuvo Jorge Curioca, director de filmes como “Insomnes”, “Juego ligero” y “Soneros son”, entre otros. En la presentación de su más reciente producción fílmica “Soneros son” en la Gira Ambulante, el documentalista expresó su satisfacción porque el número de espectadores que gusta de este género es muy amplio y las propuestas son de suma valía.
“Es innegable que hay un auge y crecimiento también en la producción, e importante es que cada día se vayan sumando más posibilidades de exhibición”, comentó. Sobre el origen de su trabajo, que desde hoy tiene funciones como parte de Ambulante 2016, Curioca detalló que en el 2000 estuvo viviendo en Madrid y que le regalaron un disco que le pareció una maravilla. “Es de música cubana con corte mexicano, un disco que me acompañó durante toda mi estancia”, anotó.
Agregó que esa satisfacción la llevó guardada en su mente hasta que en 2010 conoce a uno de los fundadores de La Mata del Son en una cantina y “me cuenta cómo se formó el grupo y cada uno de los personajes. “Ya no sólo que eran unos grandes músicos sino también las vidas de cada uno de ellos, cómo es que emigraron de Veracruz a la Ciudad de México y cómo es que esta música llega de Cuba a México en los años 50”, añadió.
Al percatarse que la mayoría de los integrantes de este grupo de músicos de son es de avanzada edad, de 70 años en adelante y dedicándose a diversas actividades, entre ellas a manejar un taxi o trabajando de taquero, expuso: “Surgió la idea de hablar de ellos y con el pretexto de reunirlos en un concierto, conocimos de cerca sus vidas, así como un retrato de barrios como el de Tepito y Peralvillo, además de Veracruz.
Tras mencionar que buscó hacer una exploración del son y las migraciones, indicó que también estaba ocupado en mostrar que este género está de cierto modo en peligro de extinción, toda vez que es una tradición que se pasa de boca en boca y ahora las nuevas generaciones prefieren otros sonidos.
No obstante, indicó, es una película que exalta la alegría de vivir y fue posible gracias a fondeadora, con la que obtuvo el dinero necesario para levantarla, de ahí que asegure que el reconocimiento de este documental es para todos aquellos quienes creyeron en el proyecto. “Soneros son” expone cómo tras 10 años de no tocar juntos, los integrantes de la Mata del Son se reencuentran y dan muestra al espectador de lo que ha sido su vida, sus carencias y excesos.
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