La primera edición del Premio Netflix México ha galardonado a las películas 12 segundos del director guatemalteco Kenneth Müller y a Todo mundo tiene a alguien menos yo del mexicano Raúl Fuentes. La primera ha sido elegida por la votación de más de 9.800 internautas y la segunda por un jurado. El premio consiste en un año de distribución en la cibercadena mundial, es decir, que los filmes estarán disponibles para más de 57 millones de subscriptores en 50 países.
Müller, de 29 años, ha explicado este viernes, un día después de recibir el premio, que fue una batalla difícil: “Pensé que iba a estar cabrón, competíamos con otros cineastas más consagrados y cuando yo filmé la peli tenía 26. Es complicado porque la gente le da like oretweet pero no entra a la página para votar”. Fuentes, de 37 años, no recogió el galardón sino que acudió una representante de la distribuidora Cinestesia, lo que lo ha dejado descolocado. “No sabíamos de la premiación, la distribuidora no nos avisó. Es una situación lamentable”, comenta indignado por teléfono.
El premio busca apoyar el cine independiente mexicano por lo que las películas debían ser nacionales, realizadas por directores formados en México y rodadas en el país. Müller llegó al país azteca hace diez años para estudiar la carrera de cine en la escuela 3dmx Digital Design University en el Estado de Jalisco, al noroeste del país. El cine no estaba en sus planes de vida. De niño tocaba al piano y sus ojos estaban puestos en la prestigiosa escuela neoyorquina Juilliard, pero con 15 años se enamoró tanto de una chica que prefirió quedarse en Guatemala. Tres años después, cuando estudiaba ingeniería electrónica, terminó con su novia y poco después la mataron de un balazo en la cabeza. Estaba de luto y perdido. Por recomendaciones decidió viajar al país vecino. “No sabía ni lo que era el cine, pero me fui. Ahí me di cuenta de que me encantaba. Al final la chica que me había sacado del arte me volvió a meter”, cuenta con sinceridad y con un acento mexicanizado, pero con destellos de su país de origen.
Fuentes estudió cine en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la Universidad Nacional (UNAM). Y fue ahí, en su alma mater, la primera vez que su película, ahora galardonada, fue aplaudida y premiada. Entró a un concurso para egresados donde la cinta que saliera seleccionada sería producida por la universidad. El filme ha participado, según recuerda el director, en 60 festivales por todo el mundo y ha sido nominada a cuatro Arieles, el máximo premio otorgado por la Academia Mexicana de Artes. “No me esperaba el premio de Netflix. Pensar que tu película va a estar en una plataforma que se ve alrededor del mundo, y llegará a gente que antes no habrían tenido acceso a ella es una enorme alegría”, cuenta el mexicano.
En ambas películas las protagonistas son mujeres que, de cierta forma, se enfrentan a ellas mismas. 12 segundos (2013) es un thriller donde Selma, una joven dedicada a su trabajo, se ve comprometida a buscar a su jefe tras una extraña desaparición. Por lo que tiene que viajar a la montaña donde deberá aprender a enfrentar sus temores para sobrevivir. Todo el mundo tiene a alguien menos yo (2012) es la historia de Alejandra, una mujer treintona que conoce a María, una chica de 18 años. Se enamoran pero Alejandra, una persona sumamente aprensiva, quiere transformar a María en un espejo de ella misma.
Ambos directores coinciden en que se ha abierto una nueva puerta para los cineastas latinoamericanos. “Somos un nuevo vino exoticóny el mundo necesita probar otro vino”, afirma entre risas Müller. Los dos tienen ya en sus cabezas el trazo de una nueva película. Fuentes adelanta que su próximo filme se llamará Anadina, la cual se deslinda de la galardonada pues esta será de ciencia ficción. El guatemalteco confiesa que su nueva cinta se titulará Alejandra y coincidirá con la premiada ya que también será un thriller, pero asegura que esta vez ahondará más en la psicología de los personajes.
El jurado que eligió a la película de Fuentes estuvo conformado por las actrices Irene Azuela y Ana de la Reguera, el director Manolo Caro, la productora Yissel Ibarra y el productor Eckehardt von Damm.
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