El realizador israelí Amos Gitai, quien concursa este martes en la Mostra de Venecia con el filme "Ana Arabia", instó al mundo del cine a promover la convivencia pacífica de cara a las tensiones actuales en Siria.
"Cineastas, artistas, escritores, tenemos que cuestionarnos y encontrar los medios para decir que una convivencia pacífica se puede, aún si es un momento agobiante para la región", declaró a la AFP el cineasta.
"Hay dinero, armas, bombas, pero se necesitan ideas, porque con ellas se cambia el planeta. Así que no hay que dudar para proponer ideas", clamó el realizador, cuyo nuevo filme, rodado en un único plano secuencia de 85 minutos de duración, rememora los tiempos cuando hebreos y árabes convivían pacíficamente .
El realizador hebreo, que propone una reflexión sobre la intolerancia que alimenta el conflicto de Oriente Medio, se inspira en una historia real, publicada por la AFP, sobre una comunidad en la que conviven árabes e israelíes partiendo de la historia de una judía nacida en un campo de exterminio en Europa que se casó con un árabe y mantuvo por más de 50 años en secreto su pasado.
El renombrado director israelí, premiado en Venecia por "Promised Land", admitió también su desconcierto ante la grave crisis en Siria y la posibilidad de una intervención militar de Estados Unidos y sus aliados en ese país.
"Me siento como todos, turbado por las brutalidades, la guerra sin fin y por el hecho de que Siria mate a sus propios ciudadanos... Pero no sé cómo se puede detener ese asunto tan preocupante", admitió.
El mensaje pacifista del filme, la ausencia de recortes como emblema de convivencia, son el hilo conductor de las historias de esas siete personas que viven en un enclave pobre pero tranquilo entre Jaffa y Tel Aviv.
"Hay que mantener la utopía en la vida incluso en los peores momentos", instó Gitai.
AFP
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