Spike Jonze, cineasta ganador del Óscar en 2014 por su guión de la película “Ella” (“Her”), y Bennett Miller, dos veces nominado a la estatuilla como director por “Capote” y “Foxcatcher”, hacen cine por la libre, no están a expensas de los estudios de cine de Hollywood.
Ambos contaron el martes en la jornada inaugural del Tag CDMX que su trabajo no está supeditado a lo que piensan los ejecutivos de la industria fílmica de Estados Unidos, por eso confeccionan los filmes que quieren y como quieren.
"Lo que te interesa no le importa a los estudios. Entonces, hacerte escuchar es difícil; por eso no persigo a los estudios para crear, no les pido permiso ni sigo instrucciones. Hago lo que debo hacer y, con fortuna, ellos se te acercarán... y es todo", consideró Miller.
Jonze aclaró que hay un factor más allá de la suerte a la hora de montar sus proyectos.
"Encontré gente que comparte las mismas pasiones que yo y es talentosa. Sigo trabajando con esa gente, que son grandes amigos. Agradezco encontrarlos y creo (que todos los cineastas) podrían tenerlos", expresó a los 2 mil 800 asistentes que acudieron al Auditorio Nacional.
Así que el director, quien saltó a la fama con “¿Quieres Ser John Malkovich?”, en 1999, cree que forma parte de una generación un tanto peculiar, como es el caso de Miller.
"La gente de mi generación no tiene las mismas ideas, pero tenemos una gran relación, entre todos, como con Charly Kaufman (guionista), todos creamos actualmente y me siento conectado con ellos", aseguró.
Miller comentó que muchos de sus compañeros no sienten responsabilidad social a la hora que sus obras se proyectan. Pero él se ve como una excepción.
"Ser honesto es lo principal, si creas algo debes serlo. Las películas son como la gente, confías en ellas o no. A mí me gusta entretener, pero siento curiosidad en todo lo que los demás te quieren decir".
En todo momento, ambos se dieron muestras de admiración y empatía, al grado de que uno complementó en algunos momentos los comentarios del otro. De hecho, afirmaron que los dos están plenamente convencidos en que el espíritu de la cinematografía radica en el proceso de la edición de los filmes.
"Editar es hacer cine, es actuar, dirigir y hacer fotografía. Son las decisiones reales y es lo más significativo de todo", puntualizó Miller.
Alaba a Iñárritu
Spike Jonze confesó no creer ser un director excepcional; por el contrario, se autodefinió como “rey de los don nadies” y aseguró que películas como “Birdman”, del mexicano Alejandro González Iñárritu, lo inspiran a seguir filmando.
El realizador no dudó en alabar el trabajo de su colega mexicano.
“Creo que definitivamente ‘Birdman’ merecía el Oscar, es una increíble película, filmes como ese o ver trabajos como ‘Mad Men’ me inspiran a seguir siendo cineasta”, señaló.
Detesta Weiner a los Millennial
La nueva generación, conocida como Millennial, desagrada a Matthew Weiner, creador de “Mad Men”, serie basaba en el mundo de la publicidad en la década de los 60 y con personajes de tres generaciones.
"Los Millennial no son respetuosos. He despedido a gente joven por eso. No hay conciencia sobre el pasado. Humprey Bogart o Shakespeare son importantes y lo ignoran. Personalmente, son mis referencias, y que ellos no las sepan es terrible. Son una celebración de la ignorancia. Luego enlistan sus películas favoritas y empiezan de 1995 a la fecha", señaló el creador.
Acompañado por los actores Elisabeth Moss y John Slatter, Weiner bromeó al decir que sólo le interesan los órganos que puedan donarle los jóvenes cuando los necesite.
“Mad Men” ya terminó, tras siete temporadas, y aborda la vida de Don Draper (Jon Hamm) un carismático creativo de publicidad, seductor pero con muchos secretos a su alrededor.
Al término de su charla, los 2 mil 800 asistentes, según organizadores, le cantaron "Las Mañanitas" a Weiner, pues el martes cumplió 50 años.
Disfrutan psicodelia
Un recuerdo memorable dejó Wayne Coyne a los 5 mil asistentes según organizadores, que atestiguaron el cierre de la primera jornada de Tag CDMX.
El Auditorio Nacional, acondicionado sólo a su mitad, vibró durante todo el acto de The Flaming Lips, banda oriunda de Oklahoma que dio muestras de virtuosismo, psicodelia y altas notas de elementos de producción.
A las 21:15 horas, los músicos, que lucieron pelucas de cabello largo e instrumentos maltratados, abrieron la velada con una pieza totalmente instrumental y explosiva: "The Abandoned Hospital Ship".
"Es genial volver a México", dijo Coyne, quien estuvo rodeado de tres botargas en la recta inicial del show.
El cantante divirtió a todos al hablar con timbre agudo, tocar una pequeña guitarra de juguete de “Dora la Exploradora” y agitar por los aires una lámpara.
El momento cumbre de la noche llegó en dos melodías: "Yoshimi Battles The Pink Robots Pt. 1" y "Vein of Stars". En la primera, el frontman pidió a sus fans gritar una parte a todo pulmón y, en la segunda, se introdujo en una burbuja plástica para caminar entre el mar de gente.
The Flaming Lips dijo adiós con "Do You Realize?", uno de sus éxitos emblemáticos que dejó con las emociones en la piel al gentío.
AGENCIA REFORMA / EL UNIVERSAL
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